18/5/08

Una de cal y una de arena


¿Por qué será que la vida siempre y, justo pegaditas, casi sin darme un respiro , me da una de cal y una de arena?

Esta semana para mi ha sido atípica. Salí de la monotonía y la rutina, para poner en marcha un proyecto que tenía en mente desde hace un tiempo y que me ha ayudado a retomar los sueños de los tiempos de universidad. He tenido que tomar decisiones importantes, en la más profunda de las soledades, porque son elecciones personales, de esas que aunque afecten a otros sólo uno en su interior puede analizar. Si me va bien, todos ganamos; si me va mal sólo yo seré la responsable.

Fue emocionante a esta altura de mi vida comenzar a sentirme mi propio jefe, decidir a qué hora llego y a qué hora me voy. Ser la propietaria de algo!!!

Para ser la primera semana me fue re bien. Es increíble cómo lo nuevo genera energía y aumenta la adrenalina.

Me reencontré con la persona que era hace veinte años atrás y, aunque sé que el tiempo perdido no se puede recuperar, la sensación de satisfacción por el sueño cumplido es inmensa.

La elección que hice en aquel momento también fue muy fuerte, tal vez fue tonta, inmadura o me agarró en un momento de bajón, pero no me arrepiento. Probablemente, si no la hubiese tomado, hoy habría cumplido un sueño pero habría sido muy infeliz, porque no tendría los maravillosos hijos con los que Dios me premió, que son mi mejor logro, mi mayor satisfacción y mi sueño más preciado.

También esta semana recibí la noticia de que una amiga a la que quiero muchísimo a fin de año se va a vivir a otra provincia. Me dejó helada la novedad. Es una oportunidad espectacular para ella, pero cómo me cuesta pensar que otra vez alguien querido se va lejos!!!! ¡Me cuesta tanto ver partir a la gente que forma parte de mi pequeño mundo! Siento que me arrancan una parte de mi. Aunque me ha pasado muchas veces, todavía no me acostumbro a las despedidas.

Para colmo otra amiga, mi hermana del alma, está cayendo nuevamente en una depresión y no sé cómo ayudarla. Lo difícil de las personas inteligentes como ella es que manejan y manipulan las situaciones y se acorazan de tal forma, que es muy complicado poder entrar en su mundo y contenerlas.

Como para rematar, fue el cumple de mi hija, que es hermosa y sana, pero también ese mismo día es el aniversario de fallecimiento de mi viejo. ¡Cómo lo extraño! ¡Cuánta falta me hace todavía! Yo siempre los 16 de mayo opto por festejar la vida, la felicidad de ver crecer a mi niña, pero por dentro siempre está la pena inmensa por la pérdida de mi papá.

Como verán, unas de cal, varias de arena. Me quedo con la vida, con la alegría, con la fuerza de la amistad que no separa la distancia, con la fe en que lo que está mal va a cambiar y que lo que está bien, será cada día mejor y, como siempre, elijo la parte medio llena del vaso y dejo de lado la parte medio vacía ...

4 comentarios:

ALMA dijo...

AYyyyyyy Susana... esas decisiones... esas noticias... esas cucharadas de cal y luego la de arena... que dificil se hace, pero creo que es bueno recordar a Zitarroza, quien escribió: "crece desde el pié,la pared / crece desde el pié / uno, dos y tres las hileras / crece desde el pié"...

Pero enhorabuena que has podido vencer tus miedos y liberarte en tu trabajo, en tu corazón, en tu mente... buscando alcanzar la paz interior... la felicidad en definitiva

Besos

Anónimo dijo...

Hola Susana,
Sabés lo que siempre digo? que por una parte, la vida te da una cachetada. Luego, levanta su mano para acariciarte.
Es así: una y una.
Lo bueno, es que tenés cosas que te satisfacen y te iluminan como decís. Las demás...bueno, no se puede hacer demasiado, a veces queda aceptar.
Brindo por tus lindos proyectos! de esos que te independizan y te hacen sonreir cuando nadie te ve.

Un beso

mavi dijo...

Flaca querida!!! siempre me divierto leyéndote, reflexiono mucho, recuerdo, y hoy me hiciste llorar, estoy medio lela últimamente, Te quiero un montón

Susana dijo...

Alma y Marcela: gracias por visitar mi blog y dejar comentarios tan gratificantes.
Vivi, yo también lloré cuando escribía que te ibas, porque son los sentimientos encontrados los que nos sensibilizan: por un lado la alegría de los nuevos proyectos y por otro la tristeza de la partida. De corazón te deseo lo mejor!!
Besos!