28/5/08

¿y las mujeres qué?


Leía en varios blogs sobre las distintas formas de "huir", "borrarse", "escaparse", "tomarse el buque" que tienen los hombres cuando te quieren dejar.

Parece que actualmente el "después te llamo" se ha convertido en una cruel frase de adiós, que retumba bastante seguido en los tímpanos femeninos.

Como en los tiempos en que "me dejaban colgada" no había celulares y, hablar por teléfono fijo carecía de intimidad, porque tampoco existían los inalámbricos, te daban el raje de frente mar, en el mejor de los casos, o desaparecían en un acto de escapismo al estilo David Copperfield.

Veo que las mujeres más jóvenes se quejan de la falta de compromiso de los hombres y me pregunto ¿cuándo un hombre ha querido comprometerse? si hasta cuando se comprometen encuentran excusas para zafar: "vos hacete cargo de los chicos que yo trabajo", "vos hacé las compras porque yo estoy esperando un llamado importante", "vos andá tranquila al cine con tu amiga que yo llegué destruido del trabajo" y ..... así sucesivamente, siempre le van esquivando al bulto, siempre queriendo parecer comprometidos, pero mientras más lejos de la responsabilidad mejoorrr!!!
Todo eso es cierto pero mujeres ... ¿cuántas veces nos hemos borrado nosotras? Cuando una historia no daba para más, ¿no hicimos lo imposible para zafar, mentimos (por supuesto que mentiras piadosas), tratamos de tomar atajos y salimos huyendo igualito que cualquier cobarde macho cabrío?

Claro que siii, muchas veces lo hicimos, ocurre que parece que cuando a nosotras nos toca sufrirlo es más cruel

¿Quién, hombre o mujer, no se sacó un peso de encima cuando mintió diciendo, con toda solemnidad y la mejor de las caras que practicó media hora antes: "necesito tiempo, no estoy seguro/a de lo que siento". Y era verdad!!! Uno/a no estaba seguro/a de salir corriendo o volando de la situación!!!

¡Ojalá yo hubiese tenido un celular hace 20 años!! Me habría ahorrado varias explicaciones estúpidas, que después me hacían sentir pésimamente mal.

Por supuesto que jamás olvidaré las veces que se borraron conmigo, pero no los culpo. Después, las vueltas de la vida, nos muestran que a cada uno nos tocó lo que merecíamos ... sino pregúntenle a mi marido que fue el último que se atrevió a borrarse conmigo y terminó volviendo con las alianzas de casamiento en el bolsillo!

1 comentario:

ALMA dijo...

Me encantó lo de tu maridito..... linda forma de borrarse!!!!.. así con las alianzas vale la pena!!!


Claro que para llegar a eso, antes tanto vos como yo hemos sufrido que se nos borren, que hayan desaparecido de los lugares donde solían frecuentar, y una andaba por ahí... moqueando por los rincones.... que los tiro de las patas!!!


Pero a rey muerto, rey puesto!!! que tanto


Besos